La Denominació d’Origen Catalunya cierra la vendímia 2018 con un aumento de la producción del 12%. Mientras de la vendímia de 2017 cerró con 44.474.325 kg, éste año lo ha hecho con 49,7 milions de kg, una cifra más próxima a lo que podemos considerar un año normal (50 millones de kg).
Las precipitaciones frecuentes del final del invierno y la primavera, con cantidades importantes en algunas zonas, han permitido que la mayoria de viñedos hayan tenido un buen desarrollo vegetativo de las cepas. además, a pesar de alguna incidéncias puntuales por pedradas o heladas primaverales, el número de racimos por cepa ha sido superior al del año pasado contribuyendo a éste aumento de la producción.
Cualitativamente hablando, la maduración técnica y fenólica han sido óptimas, si bien es cierto que el grado alcohólico medio se ha quedado alrededor de una unidad por debajo de lo que se habia registrado en la ñultima vendímia. En relación a la afectación por enfermedades fúngicas, aunque el mildiu afecto a los racimos antes y durante la floración allí donde no se había protegido el cultivo de forma adecuada, el oídio y la podredumbre se han mantenido en unos niveles razonables. En definitiva, la añada 2018 ha dado como resultado una materia prima excelente que permitirá la obtención de vinos de gran calidad.
Por lo que a variedades se refiere, cabe destacar el aumento de la cosecha, tanto para la uva blanca (+12,68%) como la uva tinta (+10,90%). Ha sido especialmente importante la reducción de la variedad de uva blanca de chardonnay (-26,26%), que no obstante se ha visto compensada por el aumento sobre todo de macabeo (+60,93%), xarel·lo (+32,30%), garnacha blanca (+7,81%) y moscatel (+5,01%) en cuanto a uva blanca, y merlot (23,76%), cabernet sauvignon (+19,97%), garnacha negra (6,37%) y tempranillo (5,11%) en cuanto a uva tinta.